El rápido avance de Adrián Olivares con TrainFES

En septiembre de 2019, Adrián sufrió un accidente cerebrovascular isquémico, que afectó la movilidad de su lado izquierdo y también el habla. Hoy, a meses de este episodio, empieza a recuperar funciones como la marcha y el habla desde su hogar. 

Junto a su mujer y sus hijas vive en Chincolco, una localidad en la comuna de Petorca. Desde allí, su hija Adriana nos contó cómo ha sido su experiencia con el uso de la electroestimulación de TrainFES. 

Gracias a un reportaje que dieron televisión, Adriana y sus hermanas llegaron a conocer TrainFES como una alternativa de tratamiento para su padre y rápidamente se puso en contacto. Con el Covid toda la rehabilitación se postergó, por ejemplo, no podía ir al CESFAM donde estaba haciendo su rehabilitación con un kinesiólogo. “ Necesitábamos este sistema. Yo hice los contactos, pregunté los montos, lo hablamos en la casa y estuvimos de acuerdo. La verdad es que ha sido increíble”. 

Pese a que Adrián partió el programa la segunda semana de julio, su hija ya puede notar los avances. 

En una primera etapa, tuvo que aprender a caminar en el CESFAM. Sin embargo su familia sabe que las secuelas podrían haber sido más graves, como los pacientes que pudieron ver en los dos meses y medio que pasó hospitalizado. “Muchos quedan alimentándose por sondas o usando pañales. La verdad es que mi papá no quiso nada de eso. Aunque no se le entendía nada, entre señales, nosotras tratábamos de deducir lo que quería decir”.

Hasta el día del ACV, Adrían era un hombre muy activo. Él vivió toda la vida en el campo, es ganadero y su vida son los animales. Su trabajo es físico, corría a caballo en los rodeos. La verdad es que subirse a un caballo ahora ha sido casi imposible. Necesitamos que primero tenga seguridad de él mismo, para que podamos ayudarlo a subir a un caballo. Mientras tanto, tratamos de movilizarlo en vehículo hacia donde están sus animales. Es con lo único que lo podemos ayudar para que él esté contento. Que se motive también para hacer ejercicio”, cuenta su hija. En la zona en la que viven, la sequía fue crítica. Muchos animales murieron y piensa que el ACV puede haber estado detonado por todo el estrés con que su padre debió lidiar.

“Por suerte en junio se juntaron muchas cosas buenas, la lluvia, las ganas de mi papá, ver crecer el pasto, la terapia de TrainFES”. 

Principales avances que he podido ver con TrainFES

A pesar del poco tiempo que su papá lleva usando el programa, Adriana ve que hoy se mantiene en pie y camina (incluso sin muletas dentro de la casa). Además, producto del ACV, el color de la mitad de su cuerpo era morado y la otra mitad de un color normal. Pero cuando partió los ejercicios de TrainFES, su cuerpo quedó del mismo color. 

Aparte tenía una inflamación muy notoria en la muñeca y en los nudillos. “Empezó con esta terapia y ha sido impresionante, ahora sus dos manos son iguales. Él está demasiado entusiasmado con todo esto, porque se ve la diferencia”, explica. 

Utilización del equipo

Cuando llegó el equipo, rápidamente coordinaron cita con el kinesiólogo para que les enseñara a usar el equipo y poder partir. “Nosotros no teníamos idea de nada de esto y por videollamada el kinesiólogo nos enseñó. Desde cómo usar la aplicación desde el teléfono, a cómo poner los parches y qué función iba a realizar cada ejercicio que fuéramos haciendo. Fue una capacitación completa; durante un mes, nos juntamos dos veces a la semana. Todas las sesiones que tuvimos fueron muy minuciosas, porque yo tenía muchas preguntas del equipo. Él fue súper claro en las respuestas y en cómo ayudarnos”. 

De esto destaca la rapidez y disposición con la que los profesionales de TrainFES para entregar asesoría en todo momento. 

“No hay que ser computín para poder hacer funcionar el aparato. Cualquier persona lo puede usar. No hay que complicarse, acá te mandan todo. Solo tienes que contar con un teléfono, las ganas de hacerlo y disponibilidad para ayudar a la persona. Es llegar y empezar”.

Evaluación previa

En un principio, lo que más le llamó la atención a Adriana del sistema fueron los buenos resultados en personas con accidentes cerebro vasculares. Eso los impulsó con más fuerza a tomar el tratamiento.

Para la evaluación previa a contratar el programa, los profesionales de TrainFES hicieron que el padre de Adriana hiciera muchos ejercicios para ver qué cosas podía y no podía hacer. “De acuerdo al diagnóstico -me pidieron toda la información clínica- estaba apto para tomar el tratamiento. Me dijeron que mientras más información era mejor para saber en qué estado estaba mi papá”. 

Yo recomendaría TrainFES para alguien que está en una situación similar a la de mi papá y de hecho, ya lo hice. Me gustaría que toda la gente que pase por algo así, pueda tomar este tratamiento. En tan poco tiempo veo resultados en mi papá y eso es súper gratificante. TrainFES fue una súper buena alternativa. Hoy está solo con este tratamiento. Con esto a nosotros nos cambió la vida, porque estamos en la casa, tienes todo. Lo importante es que la persona tenga ganas y disponibilidad”.