Entre las secuelas que puede generar un accidente cerebrovascular o una lesión en la cabeza está la afasia, trastorno que afecta la manera en que la persona se comunica y que necesita de un tratamiento especial, en que los fonoaudiólogos son fundamentales.
La fonoaudiología es la rama de la salud que se especializa en la promoción, prevención, diagnóstico, rehabilitación y habilitación para todo el ciclo vital en las áreas de comunicación y deglución.
En ellos realiza abordaje a personas con alteraciones del lenguaje, voz, audición, sistema vestibular, motricidad orofacial y deglución, con miras a una rehabilitación integral que promueva su salud y calidad de vida.
Uno de los trastornos que requiere una terapia liderada por fonoaudiólogos es la afasia, que puede afectar el habla, además de la forma en la persona escribe y comprende el lenguaje escrito y oral.
Se trata de un problema médico causado por un daño en las partes del cerebro responsables del lenguaje. Para la mayoría de las personas, estas áreas están del lado izquierdo.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos remarca que la afasia no es una afección, sino un síntoma de daño en las partes del cerebro que controlan el lenguaje.
Existen cuatro tipos principales de afasia:
El tratamiento para la afasia incluye rehabilitar la afección que la causa, junto con terapia del habla y del lenguaje. La persona con afasia vuelve a adquirir habilidades del lenguaje y aprende a usar otras formas de comunicación.
Los familiares generalmente participan en el proceso y ayudan a la persona a comunicarse, con el objetivo de mejorar su calidad de vida.
La causa más frecuente de afasia es el daño que resulta de un accidente cerebrovascular, es decir, el bloqueo o la ruptura de un vaso sanguíneo en el cerebro. La falta de suministro de sangre al cerebro produce la muerte de las células cerebrales o daño en las regiones que controlan el lenguaje.
La afasia también se puede dar por:
La Universidad de Oxford explica que la estimulación transcraneal de corriente continua (TDCS, por sus siglas en inglés) es una técnica que estimula directa y no invasivamente el cerebro aplicando corrientes eléctricas a una pequeña región del cuero cabelludo.
La corriente es generada por un estimulador que funciona con batería y pasa a través de electrodos de goma y material conductor (gel o esponjas empapadas en solución salina).
Sus efectos son neuromodeladores, y actualmente se investiga su uso para mejorar la fluidez en personas que sufren problemas de producción del habla, como la afasia.
Una revisión científica plantea que la estimulación transcraneal de corriente continua es una herramienta valiosa para establecer relaciones cerebro-comportamiento en una variedad de dominios cognitivos, motores, sociales y afectivos, y se ha demostrado que, en poblaciones sanas, modifica temporalmente comportamiento, acelera el aprendizaje y mejora el desempeño de las tareas.
Otro estudio determinó que la recuperación de la afasia podría requerir terapias complementarias a la rehabilitación fonoaudiológica, y que la estimulación de corriente continua transcraneal es una técnica neuromoduladora no invasiva que se puede usar para mejorar la actividad cerebral cortical.
Según concluyó la investigación, la TDCS es una técnica que puede ayudar a mejorar los déficits del lenguaje de las personas con afasia.
La fonoaudiología se enfoca en mejorar la salud y calidad de vida de las personas, y puede tratar a pacientes con alteraciones del lenguaje, voz, habla, audición, motricidad orofacial y deglución de manera integral.
Al mermar la comunicación, la afasia afecta el desarrollo personal y social, con secuelas que pueden abarcar todas las actividades cotidianas desde el trabajo, las relaciones interpersonales o las actividades de la vida diaria
La dificultad para expresar deseos y necesidades puede provocar vergüenza, frustración, aislamiento y depresión, entre otros problemas asociados a la memoria y el razonamiento.
Frente a esta realidad, los fonoaudiólogos son parte importante del equipo multidisciplinario de profesionales de TrainFES, conformado también por médicos fisiatras, kinesiólogos y terapeutas ocupacionales, con miras a ofrecer al paciente con secuelas de trastornos neurológicos la mejor alternativa de rehabilitación integral.
La neuroplasticidad, que es la potencialidad del sistema nervioso para modificarse y formar conexiones en respuesta a la información nueva, puede ayudar a recuperar funciones mermadas o pérdidas.
La metodología TrainFES está conformada por entrenamiento funcional, tecnología y acompañamiento permanente para posibilitar el reaprendizaje neuronal de los movimientos perdidos. Pero además, el equipo de fonoaudiólogos lidera esta rehabilitación en cuanto al lenguaje oral y escrito.
El acompañamiento permanente de profesionales posibilita una rehabilitación en pacientes con trastornos como afasia, disartria, disfagia, apraxia entre otros, para mejorar la capacidad de comunicación y con ello la calidad de vida de quienes confían en TrainFES.
Debilidad o parálisis en un lado del cuerpo y pérdida de sensibilidad en el lado opuesto son algunas de las secuelas del síndrome de Brown-Sequard (BSS), que es una afección neurológica poco común caracterizada por una lesión en la médula espinal.
Un infarto medular ocurre cuando hay una reducción del flujo sanguíneo al interior de la columna vertebral, es decir, como resultado de una isquemia originada en una arteria extravertebra
El drop foot (o "pie caído") es una dificultad de la marcha muy frecuente en personas que han sobrevivido a un Accidente Cerebro Vascular (ACV).