Cuando se produce un ACV, el cerebro deja de recibir nutrientes y oxígeno. Aunque esto se produzca por pocos segundos, es suficiente para generar consecuencias en quien lo sufre. Por esta razón es considerada una urgencia tiempo-dependiente a nivel médico, es decir, mientras antes se reciba atención médica, mejor será el pronóstico del paciente.
Un accidente cerebrovascular, también llamado “ataque cerebral”, es un trastorno que se produce debido a que el flujo de sangre a una parte del cerebro se detiene. Este puede producirse por múltiples causas y existe más de un tipo.
Puede parecer una situación con pocas probabilidades de ocurrir, sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) muestra que cada año 15 millones de personas sufren un Accidente Cerebrovascular. En cuanto a Chile, durante el año 2021 hubo 29.542 egresos hospitalarios por ACV siendo la segunda causa de mortalidad del país.
Existen dos tipos de accidente cerebrovascular, descritos por la Biblioteca Nacional de Estados Unidos (MedlinePlus):
El accidente cerebrovascular isquémico puede ocurrir de dos formas:
En cuanto a los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos, también ocurren cuando un paciente está tomando anticoagulantes, o presentan un trastorno hemorrágico. En estos casos se debe a que la presión arterial muy elevada muchas veces genera que los vasos sanguíneos se rompan.
Los síntomas de un accidente cerebrovascular varían según el área del cerebro que se encuentre afectada. En algunos casos, es posible que el paciente no se dé cuenta de que esto está ocurriendo. Esto sucede ya que en la mayoría de las veces los síntomas se presentan de manera súbita.
Los síntomas más comunes incluyen:
Se debe tomar en cuenta que los síntomas pueden presentarse de manera intermitente durante los primeros uno o dos días. Generalmente, los síntomas son más graves cuando el accidente cerebrovascular acaba de ocurrir, sin embargo, pueden agravarse lentamente.
Cuando el accidente cerebrovascular tiene como causa un sangrado en el cerebro, es común que se presente un dolor de cabeza. Este malestar tiene como características:
Algunos factores de riesgo asociados a los accidentes cerebrovasculares son:
Hay que considerar que, si no se trata debidamente y a tiempo, el paciente que ha sufrido un accidente cerebrovascular puede tener secuelas crónicas. Es sumamente importante destacar que lo primero que se debe hacer ante los síntomas es ir a urgencias.
Existen diferentes tratamientos para un ACV, dependiendo de lo que se busca tratar de manera específica. A continuación se explican estos, junto con la función de la electroestimulación en cada uno de ellos, y con estadísticas de mejoras en los tratamientos.
En el caso de la pérdida de la capacidad para tragar, TrainFES complementa la terapia fonoaudiológica tradicional con electroestimulación funcional para tratar ese tipo de problemas para deglutir y disfagia. Se ha comprobado que la terapia logra mayor respuesta y reduce los tiempos de rehabilitación.
De acuerdo a las investigaciones, este sistema también es adecuado para tratar la recuperación motora debido a la pérdida de movimientos funcionales. Una debilidad motora afecta procesos como la marcha, ducharse, alimentarse y distintas actividades de la vida diaria.
Asimismo, hoy sabemos que los efectos de la terapia de espejo en combinación con FES produce mejoras significativas en la recuperación motora de las extremidades superiores. Así lo comprobó un estudio realizado en Corea del Sur y publicado en el NIH.
La evidencia generada por TrainFES dio cuenta de los avances de 85 pacientes en cuanto a su nivel funcional, entre su primera sesión de entrenamiento y el segundo mes de terapia. Se evaluó la capacidad de mantenerse en sedente (sentado), bípedo (que se sostiene sobre los dos pies) o caminando.
La primera evaluación arrojó como resultado que: 22 de los pacientes lograban el sedente, de los cuales durante la segunda toma de pruebas 12 avanzaron al nivel bipedo (72,7%) y 4 a poder caminar (18,2%).
La segunda evaluación también demostró que de los 19 pacientes que lograban el bípedo 10 lograron la marcha (52,6%( y 9 mantuvieron su nivel (47,4%).
Además, destaca el hecho de que ninguno de quienes utilizaron la terapia FES mostraron retrocesos.
Al ver estas cifras es posible notar los avances reflejados luego de la neurorehabilitación con TrainFES, en dónde la metodología FES cumple un papel crucial para la recuperación motora de los pacientes.
Este tipo de afección tiene múltiples subclasificaciones, que deben ser abordadas de manera distinta. A continuación te contamos sus características y cómo la electroestimulación puede ayudar en cada caso.
Se ha constatado que muchos de los contagiados han presentado accidentes cerebrovasculares, incluso cuando no pertenecen a la población de riesgo.
El movimiento constante de las manos en una persona suele ser asociado con la enfermedad de Parkinson, pero ese síntoma tan reconocible es solo uno de los que genera esta patología neurodegenerativa, que también trae consigo rigidez muscular, lentitud en los movimientos voluntarios y dificultad para mantener el equilibrio, además de deterioro cognitivo.